CEREZA CREMOSA
© MARIVILLA
Autoengañarse cuando se pide una ensalada ligera llena de aguacate y aceite.
Sentirse bien con uno mismo cuando se elige un sandwich vegetal cargado de mayonesa y maíz.
Hacer como que estás a dieta cuando piden un helado de fruta, pero lleno de crema y tops que engordan más que una tarrina de mantequilla.
Vamos, una cereza cremosa de toda la vida.